miércoles, 5 de agosto de 2009

El estigma de la enfermedad mental y Las Palmas


Unas compañeras psiquiatras (MIR y Adjunta, respectivamente), acaban de publicar la breve columna que sigue a continuación en el periódico local de Las Palmas de Gran Canaria (con fecha de 4 de Agosto de 09).

MARTA WINTER NAVARRO/PETRA LEÓN Días pasados el diario LA PROVINCIA publicó la noticia de un desgraciado suceso ocurrido en Gran Canaria, en el que una persona que padece un trastorno mental protagonizó una agresión grave. Antes que nada, queremos mostrar nuestro pesar y nuestro apoyo a las personas afectadas por este suceso; no es nuestra intención hablar de un caso que sólo conocemos por lo publicado en la prensa, pero como profesionales de la Salud Mental queremos hacer una serie de reflexiones sobre el modo, y las consecuencias, en el que los medios de comunicación tratan cualquier suceso violento en el que se encuentre implicada una persona presumiblemente afectada por una enfermedad psiquiátrica.


Siempre que leemos una noticia de este tipo nos preguntamos, si en el caso de que la persona implicada hubiese padecido otra enfermedad cualquiera, el periodista hubiese hecho constar el nombre y apellidos de la persona, la situación laboral, el tipo de enfermedad, y si así fuera, si el suceso quedaría suficientemente explicado por padecer dicha enfermedad, como parece desprenderse de esta noticia.


Hechos como el que estamos comentando no sólo causan un enorme sufrimiento sino que además, contribuyen a que persista la estigmatización de las personas que padecen enfermedades mentales. Dada la influencia de los medios de comunicación en la sociedad, el modo en que tratan estos sucesos (su amplia cobertura, la noticia de portada, la atribución causal implícita del acto agresivo al padecimiento de la enfermedad, etcétera), influye de forma determinante en las creencias y actitudes de la población general hacia las personas que padecen este tipo de enfermedades.


La identificación de la violencia con la enfermedad psíquica, además de dar a los lectores una información sesgada y falta de rigor científico, sitúa a las personas afectadas fuera de lo considerado normal, refuerza las actitudes sociales negativas hacia éstos y dificulta entre otras, sus posibilidades de estudio, de trabajo o de vivienda, contribuyendo a disminuir su integración social y en última instancia, su recuperación.


Si bien es cierto que las personas con enfermedades mentales pueden en ocasiones cometer actos agresivos, los últimos estudios epidemiológicos indican que las personas con esquizofrenia, una de las enfermedades mentales más graves, contribuyen por debajo del 5% a la violencia global. Además, un análisis más exhaustivo pone de manifiesto que en este porcentaje es la violencia que reciben por otras personas la que prevalece frente a la que ellos pueden ejercer. Por otro lado, en los casos donde se producen realmente actos violentos, existen otras variables específicas relacionadas con ellos y que hay que considerar, entre las que se destacan la ausencia de tratamiento, la falta de contacto social, los entornos vecinales desorganizados, el consumo de sustancias y las situaciones de hostilidad, que son elementos determinantes también presentes en el resto de la población general donde la prevalencia de violencia es mayor.


El estigma social hacia las personas que padecen enfermedades psiquiátricas es un fenómeno complejo, profundamente arraigado en la población y que requiere distintas estrategias, y en distintos ámbitos, para lograr erradicarlo, por lo que creemos firmemente que todos debemos contribuir a ello. Es necesario poner todos los medios posibles para que las personas con enfermedad mental reciban el tratamiento más apropiado, apoyar la investigación y el desarrollo de recursos, luchar contra los prejuicios y el rechazo hacia estas personas, para garantizar de esta manera la integración real en nuestra sociedad. El papel de los medios de comunicación es, en este sentido, fundamental.

Imagen usada bajo los principios de fair use.

2 comentarios:

Tira los muros dijo...

El estigma social y autoestigma es la gran dificultad para la Recuperación de las personas que padecen un trastorno mental.

www.tiralosmuros.blogspot.com

enrique dijo...

Aunque tengan razón, se echa en falta el rigor que transformaría un artículo de opinión en hechos objetivos. Por lo menos:

- especificar la incidencia de la esquizofrenia en la población general, para valorar el 5% de contribución a los actos violentos mencionado o, alternativamente, indicar el porcentaje de personas afectadas protagonistas de actos violentos y lo mismo en personas sin esa enfermedad.
- detallar las cifras de ese análisis más exhaustivo sobre violencia recibida frente a violencia impartida.