sábado, 31 de octubre de 2009

Papers for a Halloween Night...

Se supone que tengo que estar preparando un importante peritaje médico-legal pero los dos artículos que menciono a continuación son tan exóticos, que no me he podido resistir a comentarlos un poco y a circularlos.

El primero tiene el sugestivo título de "Psicofarmacología de la Licantropía" y se publicó en el Canadian Medical Association Journal en 1992.

La mención a la lupinona es tan desternillante como la de los musicoides endógenos de un auténtico "Citation Classic" del THMJ. Supongo que como dice el autor del blog en dónde lo he obtenido, se trata de Halloween y por lo tanto hay que hablar de lunas llenas y hombres lobo. El blog se llama The Neurocritic y está lleno de aportaciones curiosas e interesantes (confidencialmente me alegra que me haya enterado antes que el mítico Vaughan Bell del no menos legendario Mind Hacks).

El otro artículo cifra, en esencia, la condición de adolescentes eternos de los hombres, el título es brutalmente obsceno: "Fellatio by Fruit Bats prolongs copulation time" o "La felación en murciélagos frugívoros aumenta el tiempo de cópula". Supongo que encaja también en la esencia de la noche, por aquello del murciélago...

Y, en un tono más serio, no dejen de leer este artículo de la revista Brain (In the psychiatrist's chair: how neurologists understand conversion disorder) acerca de la impresión que tienen 22 neurólogos acerca de los síntomas de conversión en sus pacientes: el modelo que aceptan es el del ¡engaño!

Enjoy! Happy Halloween!

En la imagen: las estructuras químicas de la lupinona y la buldogona.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Lo de los murciélagos es realmente impresionante. Ya no por el hecho de realizar una felación en plena cópula (ni siquiera sé cómo copulan esos "vampiros" o "ratones pilotos" que dice la ratita al presentarle "mi novio aviador" a su amiguita) si no cómo la naturaleza hace "imposibles" maniobra para que todo siga su curso. Al Ser Humano le pasa lo contrario. Bueno, le pasaría lo contrario, de poder hacernos una felación en plena cópula ya que el acto sexual se reduciría a la mitad y con la fama de efímeros copuladores que tenemos lo hombres.

La naturaleza aquí parece que se pone de nuestro lado (del macho) ¿no cree?